¡PROLETARIOS DE TODOS LOS PAÍSES, UNÍOS!

 

 

EN EL 112 ANIVERSARIO DEL NATALICIO

DEL PRESIDENTE MAO TSE-TUNG

PREPAREMONOS PARA CELEBRAR

LOS 40 AÑOS DEL INICIO DE LA

GRAN REVOLUCION CULTURAL PROLETARIA CHINA

 

 

Los maoístas somos hoy en día, y debemos luchar por asumirnos como tales, el destacamento más decidido y firme del proletariado internacional, hemos heredado un modo de pensar que nos posiblita una comprensión más universal, profunda y responsable de nuestros triunfos y derrotas a lo largo del siglo XX, y de la inquebrantable voluntad de combatir al imperialismo, luchar por la Nueva Democracia y el Socialismo en las condiciones concretas del siglo XXI. Lo anterior es posible porque permanentemente estamos valorando y profundizando nuestra comprensión sobre el significado de la tercera cumbre y encontrando en los desarrollos del marxismo-leninismo propuestos por el Presidente Mao, nuevos fundamentamos que nos permitan transformarnos, transformando el mundo.

 

En este 112 aniversario del natalicio del Presidente Mao, nuestro Partido Comunista de Colombia-Maoísta PCC-M, se propone señalar el significado revolucionario que ha tenido para la humanidad y en particular para los comunistas, la Gran Revolución Cultural Proletaria China, como resultado del proceso histórico de la lucha de clases por el socialismo en China, pero también como su aporte más fundamental al marxismo leninismo, la teoría de la continuación de la revolución bajo la dictadura del proletariado.

 

Mao Tse-tung nació el 26 de diciembre de 1893 en el seno de una familia campesina del pueblo Shao-Shan, en Sian Tan, provincia de Hunan y murió a los 82 años, el 9 de septiembre de 1976. Su infancia y juventud se desarrollaron en el periodo final de la última de las dinastías imperiales feudales, la dinastía Chin, y durante el auge del imperialismo y sus formas colonialistas. En sus primeros 50 años de vida vivió las 2 guerras mundiales y todas las guerras civiles y patrióticas del pueblo chino contra el imperialismo y el feudalismo, por lo que fueron años en que se dedicó a la lucha revolucionaria y a la síntesis de sus propias experiencias. Participó en la fundación del Partido Comunista de China en 1921 y durante 15 años, dando lucha de líneas, llegó a ser su jefatura a partir de la célebre reunión de Sun Yi en enero de 1935, en medio de la Gran Marcha, en donde se criticaron los errores de Wang Ming y Po Ku cometidos durante la Quinta Campaña de Cerco y Aniquilamiento; a partir de entonces se confió a Mao la dirección del Partido, el heroico combatiente, y el Ejército Rojo. Cuando los imperialistas japoneses lanzan su ofensiva colonialista sobre China, Mao llamó a la formación del Frente Único con el Kuomintang, así se construyen bajo su dirección las “tres varitas mágicas” con las que organizó, movilizó y dirigió al pueblo para la transformación revolucionaria de la sociedad china.

 

A la edad de 56 años, vio el triunfó con la derrota primero de los japoneses y luego del Kuomintang, dando paso a la creación de la República Popular China y a la construcción de la sociedad socialista, a lo que dedicó sus últimos 30 años de vida. Como Jefatura del Partido y del Estado, en medio de lucha de líneas expresada como lucha de clases entre el camino capitalista y el camino socialista, desplegó el Movimiento por la Educación Socialista, el Gran Salto Adelante y las Comunas Populares y en 1966 se trazó la tarea lanzar la Gran Revolución Cultural Proletaria, que duró 10 años. Durante todo este tiempo Mao buscó hacer de China un poderoso país socialista, con un importante desarrollo económico que sirviera para solucionar los problemas de las masas, haciendo más conciente su participación en la gestión del Estado y de la base económica.

 

Durante toda su vida Mao fue un subversivo e hizo de la subversión un método de pensamiento y de acción, pues estabilidad y movimiento son dos contrarios interrelacionados. Transformó las condiciones de vida que le había proyectado la autoridad paterna; las relaciones de poder en el seno del PCCH para definir una estrategia revolucionaria que triunfó; las ideas existentes hasta entonces sobre la construcción del socialismo y luchó por hacer concientes a los hombres de la importancia de transformarse así mismos, para no acomodarse y estancarse en ningún momento de su vida y de la lucha. El se subvirtió a sí mismo, y se hizo un marxista polifacético: militar, economista, filósofo, estadista, poeta, maestro, dirigente político, patriota, llegando a ser el personaje más significativo de toda la historia del siglo XX en China y en el mundo, después de la muerte de Lenin.

 

Vamos a celebrar los 40 años de la GRCP, porque como lo plantea nuestra Línea del I Congreso, fue

 

“la mayor movilización de masas en la historia de la humanidad para consolidar la dictadura del proletariado, prevenir la restauración del capitalismo y construir el socialismo, fue un avance en el desarrollo de la dictadura del proletariado”. (Línea Ideológica, PCC-M. 2001)

 

Esto implicó aprender a transformase, transformando el mundo, haciendo más revolucionaria la conciencia del hombre, como uno de los aspectos de lo que significa ser comunista, tal como es expuesto en el punto 1 de la Decisión del Comité Central del Partido Comunista de China sobre la Gran Revolución Cultural Proletaria aprobada el 8 de agosto de 1966:

 

“La gran revolución cultural proletaria que se desenvuelve actualmente, una gran revolución que llega al alma misma de la gente, representa una nueva etapa, aún más profunda y más amplia, en el desarrollo de la revolución socialista en nuestro país. ...Aunque derrotada, la burguesía todavía trata de valerse de las viejas ideas, cultura, hábitos y costumbres de las clases explotadoras para corromper a las masas y conquistar la mente del pueblo en su esfuerzo por restaurar el poder. El proletariado debe hacer exactamente lo contrario: debe propinar golpes despiadados y frontales a todos los desafíos de la burguesía en el dominio ideológico y cambiar la fisonomía espiritual de toda la sociedad utilizando sus propias nuevas ideas, cultura, hábitos y costumbres.”

 

Esta lucha de clases contra los “cuatro viejos”: las viejas costumbres, los viejos hábitos, la vieja cultura y los viejos modos de pensar, tenía que ver con la respuesta a cómo conducir la lucha de clases en el socialismo, cuya base objetiva es qué clase social dispone de los medios de producción, lo que en el socialismo depende de la línea ideológico-política que se sigue, y de la línea de clase que ejerce la dirección de la economía y del Estado.

 

Como un líder revolucionario completo, la lucha de Mao fue para que con la dirección del Partido, tanto los cuadros dirigentes, el conjunto del trabajo partidario y las amplias masas, asumieran la dialéctica y el materialismo como modo de pensar. Así lo hizo con sus dos principales textos filosóficos ­Sobre la práctica y Sobre la contradicción, cuando en 1937 trabajó por dotar al Partido de una visión dialéctica para dirigir las tareas de la revolución y construir acertadamente los 3 instrumentos, movilizando y dirigiendo a las amplias masas populares. Este método vuelve a ser usado durante la GRCP, cuando en China (al igual que había ocurrido en la URSS) se estaba dando un proceso de surgimiento de una nueva burguesía en el seno mismo del Partido, ciertos funcionarios aprovechaban su autoridad y sus puestos en el aparato administrativo del partido, de la economía o del Estado para beneficiarse individualmente. La superestructura se estaba transformando en una fuerza contraria a la edificación del socialismo. Se trataba entonces de hacer más conciente a las masas y llamarlas a participar activamente en la defensa del socialismo.

 

Con la GRCP Mao desarrolló, en contracorriente a la tradición de gran parte del Movimiento Comunista Internacional, lo que parecía imposible, escuchar a las masas, aprender de ellas y a la vez conducirlas y dirigirlas en su avance, pues se supone que si uno aprende no dirige y si dirige no tiene tiempo para escuchar. Por eso el mérito de Mao, saber andar con las masas, escucharlas, pero dirigirlas en su avance en medio de su propio proceso de transformación.

 

En la lucha por la transformación de las masas y de la sociedad socialista, en medio de una lucha de clases, Mao y sus seguidores fueron derrotados, se cometieron errores que necesitamos comprender más profundamente, y que permitieron fortalecer las posiciones a favor del desarrollo del camino capitalista. Pero lo que quedó como derrotero para los comunistas, es que es a través de revoluciones culturales y la consigna “promover la producción y empeñarse en la revolución” que llegaremos al comunismo.

 

Durante el 2006, nuestro Partido Comunista de Colombia- Maoísta PCC-M debe desarrollar una labor de propaganda y educación hacia adentro y hacia fuera para aprehender los logros de la Gran Revolución Cultural Proletaria China y sacar lecciones que nos sirvan para la construcción de nuestro trabajo y lucha por la Revolución de Nueva Democracia, por el socialismo y el comunismo.

 

VIVA EL MARXISMO LENINISMO MAOISMO

CELEBREMOS LOS 40 AÑOS DEL INICIO DE LA GRAN REVOLUCION CULTURAL PROLETARIA CHINA

HONOR Y GLORIA A LA MEMORIA DE MAO TSE-TUNG

 

PARTIDO COMUNISTA DE COLOMBIA-MAOISTA PCC-M

26 DE DICIEMBRE DE 2005