LINEA MILITAR

La línea militar del Partido Comunista de Colombia Maoísta, PCC-M, para la revolución de Nueva Democracia se compone de los aspectos fundamentales sobre las leyes de la guerra revolucionaria en general y las características de la guerra revolucionaria en Colombia. La necesaria profundización y desarrollo de este aspecto de la línea política general debe realizarce con la aplicación de la verdad universal del marxismo-leninismo-maoísmo a las condiciones concretas de Colombia.

Para poder lograr el triunfo de la guerra y el cumplimiento de los objetivos de la revolución de Nueva Democracia debemos estudiar las leyes de la guerra en general y de la guerra revolucionaria y las leyes especificas de la guerra revolucionaria en Colombia.

Guerra y Política

El objetivo político de la guerra. Todas las guerras que han existido desde la aparición de las clases han tenido un carácter político, es decir, la guerra entre naciones, Estados, clases o grupos políticos siempre ha perseguido un fin político y es la forma más alta de lucha para resolver las contradicciones entre naciones, Estados, clases o grupos políticos cuando las contradicciones han llegado a una determinada etapa de desarrollo de donde no pueden proseguir por los medios habituales. Clausewitz afirma correctamente que "La guerra es la continuación de la política por otros medios" por lo tanto "la guerra es política, y es en sí misma una acción política" . Sin embargo, es un error afirmar que toda política es guerra, ya que la guerra tiene sus peculiaridades que no equivalen a la política en general.

El objetivo de la guerra es acabar con la guerra y el medio para eliminarla es la guerra, por eso hay que oponer la guerra revolucionaria a la guerra contrarevolucionaria. La guerra a la vez que es un monstruo de matanza, crueldad y destrucción también permite la construcción, progreso, avance y elevación cultural de los pueblos.

El objetivo fundamental de la guerra. La conservación de las fuerzas propias y la destrucción de las del enemigo, es la esencia y principio básico de la guerra que impregna la técnica de combate, la táctica, las campañas y la estrategia. La retirada hace parte de la categoría de la defensa y es su continuación, y la persecución es una continuación del ataque.El objetivo fundamental de la guerra, la guerra como política con derramamiento de sangre, es "conservar las fuerzas propias y destruir las del enemigo'", (Mao Tsetung, Tomo I) para conseguirlo se debe establecer una correcta relación entre el ataque y la defensa siendo el ataque lo principal ya que sólo se puede conservar eficazmente las fuerzas propias destruyendo en gran número las del enemigo.

Las leyes de la dirección de la guerra. El Presidente Mao Tsetung nos enseña que las leyes de la dirección de la guerra cambian en función de las condiciones de la guerra, o sea, tiempo, lugar y carácter de la misma porque:


En cuanto al tiempo las leyes de la guerra en cada etapa histórica son diferentes.

En cuanto al lugar las leyes de la guerra en cada país o nación tienen sus particularidades debido a sus características.

En cuanto al carácter las leyes de la guerra revolucionaria y la contrarrevolucionaria tienen sus respectivas características.

Por lo tanto el "estudio de las leyes de la dirección de las guerras que se producen en diferentes etapas históricas, que son de diferente carácter y que se sostienen en diferentes lugares y por diferentes naciones, debemos concentrar nuestra atención en sus características y en su desarrollo y oponernos a todo enfoque mecánico del problema de la guerra" (Mao Tsetung, Problemas estratégicos de la guerra revolucionaria en China, O.E, Tomo I).Además hay que tener en cuenta en la dirección de una guerra que "los rasgos peculiares de la guerra hacen surgir un conjunto de organizaciones especiales; una serie de métodos particulares y un proceso específico de la guerra. Las organizaciones son las fuerzas armadas y cuanto a ellas es anejo. Los métodos son la estrategia y la táctica para dirigir la guerra. El proceso es la forma particular de actividad social en que las fuerzas beligerantes atacan o se defienden empleando una estrategia y una táctica favorables para sí y desfavorables para el enemigo". (Mao Tsetung, Sobre la guerra prolongada, O.E, Tomo II)

La ciencia militar. La teoría militar desarrollada por el Presidente Mao Tsetung esta conformada por la ciencia de la estrategia, las campañas y las tácticas. La estrategia militar consiste en el estudio de las leyes de la dirección que rigen una situación de guerra en su conjunto. Una guerra puede abarcar el mundo entero, un país, una zona guerrillera independiente o frente de operaciones independiente. Toda situación de guerra de carácter tal que requiera una consideración global de sus aspectos y etapas, es una situación de guerra en su conjunto.

La ciencia de las campañas y la táctica militar estudia las leyes de la dirección de la guerra que rigen una situación parcial de guerra. Un combate es una situación parcial de guerra y hace parte de la táctica.

 

La Guerra Revolucionaria

En la historia solo se conocen dos tipos de guerra: las justas y las injustas; los comunistas deben apoyar las guerras justas, es decir, las que están por los intereses fundamentales del pueblo, mientras que toda guerra contrarrevolucionaria es injusta pues no defiende sino ataca esos intereses. Las línea divisoria entre los comunistas y todos los explotadores es si se parte de eliminar todas las guerras, esto es fundamental al estudiar las leyes de la guerra revolucionaria.

"La experiencia de la lucha de clases en la era del imperialismo nos demuestra que solo mediante la fuerza del fusil la clase obrera y las demás clases trabajadoras pueden derrotar a la burguesía y la clase terrateniente armada, en este sentido cabe afirmar que sólo con el fusil se puede transformar el mundo entero." (Mao Tsetung, Tomo I, )

La guerra revolucionaria es la guerra de las masas y sólo puede realizarse movilizando a las masas y apoyándose en ellas. La participación del pueblo formará un vasto mar para ahogar al enemigo creando las condiciones para compensar nuestra inferioridad en armas y permitirá superar todas las dificultades en la guerra. El Presidente Mao Tsetung plantea que para movilizar al pueblo a la guerra revolucionaria se debe:Primero, explicar el objetivo político de la guerra, hacer comprender a cada combatiente y a las masas en general por qué es necesario combatir y en qué les concierne la guerra. Segundo, además de explicar el objetivo se deben explicar las medidas y la política que se han trazado para alcanzar el objetivo político, es decir el programa político concreto. Tercero, para efectuar la movilización de las masas se deben usar todos los elementos y formas de propaganda y agitación como el mitin, los volantes, carteles, periódicos, libros, folletos, radio, expresiones artísticas (teatro, filminas y películas), escuelas e instituciones educativas, sindicatos, asociaciones y organizaciones populares. Cuarto, no basta con movilizar una vez; la movilización política para la guerra revolucionaria debe efectuarse permanentemente. Nuestra tarea consiste en vincular la movilización política con la marcha de la guerra y con la vida del pueblo, y hacer de ella un trabajo permanente. La guerra popular es una guerra revolucionaria de las amplias masas populares cuya médula son las bases de apoyo y en la que se combina la lucha armada con la lucha política, la ofensiva militar con la insurrección de masas y la guerra de guerrillas con la guerra regular. Donde cada persona se convierte en un combatiente y utiliza todo tipo de armas disponibles y toda forma de organización y lucha para acorralar y vencer al enemigo. En guerra la forma principal de lucha es la lucha armada y el ejercito es la principal forma de organización de las masas. La guerra popular necesita de una organización comunista o revolucionaria que oriente, coordine y dirija las diferentes formas de lucha, centralice la revolución y la guerra y potencie la lucha revolucionaria. El Presidente Mao Tsetung desarrollo la línea y teoría militar del proletariado a nivel universal como producto de su aplicación en la revolución de Nueva Democracia en China, referencia obligada para las naciones oprimidas y que se resumen en:

El camino de "rodear las ciudades desde el campo".

Las tres etapas estratégicas: Defensiva, Equilibrio y Contraofensiva.

El carácter prolongado de la guerra popular.

El papel de los tres instrumentos.

El papel de la guerra de guerrillas.

Campañas y contracampañas de cerco y aniquilamiento

Las bases de apoyo como médula de la guerra popular.

Los principios militares de la guerra popular prolongada.

El camino de rodear las ciudades desde el campo. Partir de las zonas rurales para avanzar sobre las pequeñas y medianas poblaciones, apuntando a cercar las ciudades intermedias y grandes, elevando el nivel de la lucha hasta coordinar la guerra fuera de las grandes ciudades con la insurrección desde dentro hasta tomarlas finalmente; camino estratégico recorrido por diferentes países del tercer mundo que han enfrentado la guerra revolucionaria. Este camino estratégico debe aplicarse de manera creadora en las naciones oprimidas según sus características económico-sociales y los periodos por los cuales atraviesa la revolución y la guerra como escribió el Presidente Mao: "la experiencia de la revolución China, que consiste en crear bases de apoyo en las zonas rurales, utilizar el campo para rodear las ciudades y finalmente tomarlas, no necesariamente es aplicable para estos países, pero puede servirles de referencia." (Algunas experiencias en la historia de nuestro Partido, O.E, Tomo V).

Etapas de la guerra popular. Producto de la correlación de fuerzas en la guerra popular, las fuerzas revolucionarias deben luchar por pasar del aspecto débil de la guerra revolucionara al aspecto fuerte y hacer que el enemigo pase de lo fuerte a lo débil, para ello la guerra popular debe pasar por tres etapas estratégicas: defensiva, equilibrio y contraofensiva. Este planteamiento es fundamental para darle coherencia a los planes estratégicos y tácticos operativos en la toma del poder paso a paso.

El carácter prolongado de la guerra. Un guerra popular es prolongada por la correlación entre todos los contrastes existentes entre las fuerzas revolucionarias y las fuerzas contrarevoluciónarias, referido: al carácter de la sociedad, al poderío político, económico y militar del enemigo, a la existencia del ejército revolucionario y su nivel de desarrollo, a la existencia y capacidad política del Partido Comunista y a la existencia y desarrollo de las bases de apoyo de la revolución.

Los tres instrumentos en la revolución y la guerra. El Presidente Mao planteó que la existencia de los tres instrumentos, el Partido, el Ejército y el Frente Unico constituyen las tres cuestiones fundamentales de la revolución y la guerra y que la comprensión correcta de estas tres cuestiones y su interconexión equivalía a dirigir de manera acertada toda la revolución. Por lo tanto, los comunistas de las naciones oprimidas deben construirlos si no existen o desarrollarlos y conducirlos correctamente cuando han sido establecidos por otras fuerzas revolucionarias como producto del avance de la revolución y la guerra. Teniendo en cuenta que el Partido es el heroico combatiente y dirección de la revolución y la guerra revolucionaria

El papel de la guerra de guerrillas en la guerra popular. La guerra de guerrillas es la forma de lucha inicial de toda guerra revolucionaria, su desarrollo permite la creación de fuerzas regulares, bases de apoyo y las condiciones para la guerra de movimientos. La guerra de guerrillas cumple un papel estratégico cuando la geografía del país permita su desarrollo y la guerra revolucionaria adquiera un carácter prolongado.

La guerra de guerrillas al llegar a cierto nivel de su desarrollo requiere de la guerra regular (de carácter guerrillero) y de las bases de apoyo, sin estas dos condiciones no podrá mantenerse ni desarrollarse, infligiendo derrotas a la revolución.

Campañas y contracampañas de cerco y aniquilamiento. En las guerras revolucionarias la principal forma que utiliza el enemigo para combatir a la revolución son las campañas de cerco y aniquilamiento, por lo tanto los revolucionarios deben aprender a preparar su defensiva y ofensiva, es decir, a planear contracampañas de cerco y aniquilamiento

Las bases de apoyo como médula de la guerra popular. Las bases de apoyo son la retaguardia de la revolución donde se arman y organizan las masas para establecer y mantener el nuevo poder en formación, donde se apoyan las fuerzas guerrilleras para cumplir sus tareas estratégicas o tácticas; sin estas bases la guerra de guerrillas no podrá mantenerse por mucho tiempo ni desarrollarse. Las condiciones fundamentales para establecer una base de apoyo son: "contar con fuerzas armadas, emplearlas para infligir derrotas al enemigo y, con ayuda de ellas, movilizar a las masas populares. La ampliación de las bases de apoyo y la creación de nuevas, concreta el camino de "rodear las ciudades desde el campo". (Mao Tsetung, Problemas estratégicos de la guerra de guerrillas contra el Japón, O.E, Tomo II)

Principios militares de la guerra popular prolongada. El Presidente Mao Tsetung sintetizó la experiencia de la guerra popular prolongada de China en los siguientes diez principios militares que son referencia obligada para los comunistas y revolucionarios:

Asestar golpes primero a las fuerzas enemigas dispersas y aisladas, y luego a las fuerzas enemigas concentradas y poderosas.

Tomar primero las ciudades pequeñas y medianas y las vastas zonas rurales, y luego las grandes ciudades

Tener por objetivo principal el aniquilamiento de la fuerza viva del enemigo y no el mantenimiento o conquista de ciudades o territorios. El mantenimiento o conquista de una ciudad o un territorio es el resultado del aniquilamiento de la fuerza viva del enemigo, y, a menudo, una ciudad o territorio puede ser mantenido o conquistado en definitiva sólo después de cambiar de manos repetidas veces.

En cada batalla, concentrar fuerzas absolutamente superiores (dos, tres, cuatro y en ocasiones hasta cinco o seis veces las fuerzas del enemigo), cercar totalmente las fuerzas enemigas, procurar aniquilarlas por completo, sin dejar que nadie se escape de la red. En circunstancias especiales, usar el método de asestar golpes demoledores al enemigo, esto es, concentrar todas nuestras fuerzas para hacer un ataque frontal y un ataque sobre uno o ambos flancos del enemigo, con el propósito de aniquilar una parte de sus tropas y desbaratar la otra, de modo que nuestro ejército pueda trasladar rápidamente sus fuerzas para aplastar otras tropas enemigas. Hacer lo posible por evitar las batallas de desgaste, en las que lo ganado no compensa lo perdido o sólo resulta equivalente. De este modo, aunque somos inferiores en el conjunto (hablando en términos numéricos), somos absolutamente superiores en cada caso y en cada batalla concreta, y esto nos asegura la victoria en las batallas. Con el tiempo, llegaremos a ser superiores en el conjunto y finalmente liquidaremos a todas las fuerzas enemigas.

No dar ninguna batalla sin preparación, ni dar ninguna batalla sin tener la seguridad de ganarla; hacer todos los esfuerzos por estar bien preparados para cada batalla, hacer todo lo posible porque la correlación existente entre las condiciones del enemigo y las nuestras nos asegure la victoria.

Poner plenamente en juego nuestro estilo de lucha: valentía en el combate, espíritu de sacrificio, desprecio a la fatiga y tenacidad en los combates continuos (es decir, librar combates sucesivos en un corto lapso y sin tomar reposo).

Esforzarse por aniquilar al enemigo en operaciones de maniobras. Al mismo tiempo, dar gran importancia a la táctica de ataque a posiciones con el propósito de apoderarse de los puntos fortificados y de las ciudades del enemigo.

Con respecto a la toma de las ciudades, apoderarse resueltamente de todos los puntos fortificados y todas las ciudades débilmente defendidos por el enemigo. Apoderarse, en el momento conveniente y si las circunstancias lo permiten, de todos los puntos fortificados y todas las ciudades que el enemigo defienda con medianas fuerzas. Apoderarse de los puntos fortificados y las ciudades poderosamente defendidos por el enemigo cuando las condiciones para ello hayan madurado.

Reforzar a nuestro ejército con todas las armas y los hombres capturados al enemigo. La fuente principal de los recursos humanos y materiales de nuestro ejército está en el frente.

Aprovechar hábilmente el intervalo entre dos campañas para hacer descansar, adiestrar y consolidar a nuestras tropas. Los períodos de descanso, adiestramiento y consolidación no deben ser en general muy prolongados para no dar, hasta donde sea posible, ningún respiro al enemigo.

La Guerra Revolucionaria en Colombia

Las características de la guerra revolucionaria en Colombia. La guerra revolucionaria en Colombia tiene sus propias características que corresponden a la estructura económico-social y a la existencia de una guerra civil revolucionaria

Primera Característica. El carácter de la sociedad colombiana es neocolonial, capitalista burocrática con semifeudalismo, con una extensión geográfica mediana que brinda buenas posibilidades para la guerra de guerrillas. En Colombia, actualmente se desarrolla una guerra civil revolucionaria en regiones históricamente importantes por su tradición de lucha armada y de masas. iniciada desde mediados de la década del 60 que ha pasado por varios periodos, Colombia es un país donde el capitalismo es preponderante en la sociedad. Cuenta con cinco grandes ciudades con más de un millón de habitantes cada una, más 27 ciudades intermedias capitales de departamento, otras ciudades pequeñas y de pueblos de carácter agrícola y comercial. Estos centros urbanos coexisten con regiones atrasadas y estancadas en su desarrollo. Es un país con una población de 40 millones de habitantes compuesto de proletarios, asalariados agrícolas, campesinos pobres y medios, semiproletarios y pequeña burguesía urbana, burguesía nacional y un número reducido de gran burgueses y terratenientes. En Colombia la población urbana es superior a la población rural. La infraestructura para el mercado interior es importante. Su configuración física es variada y compleja, con una parte de la cordillera de los Andes que se trifurca en cordilleras occidental, central y oriental que recorren al país de sur a norte con grandes alturas, cañones y ramales, abundantes defensas naturales y entre las cordilleras, los valles de los ríos Cauca y Magdalena. Además existen extensas llanuras, grandes lagunas y caudalosos ríos y unas extraordinarias cuencas hidrográficas. El territorio colombiano posee tierras fértiles, extensos bosques, abundantes riquezas minerales y diversidad de climas.

Segunda Característica. El enemigo es fuerte. Las fuerzas armadas (ejercito, marina, aviación y policía) columna vertebral del Estado burocrático-terrateniente pro imperialista son centralizadas y modernas con diferencias internas en cuanto a la conducción de la guerra contrasubversiva, actualmente están siendo más equipadas y entrenadas a través del Plan Colombia, apoyado y preparado por el imperialismo norteamericano. Un sector de la gran burguesía y terratenientes han conformado una organización política de carácter fascista y un ejercito, las Autodefensas Unidas de Colombia, vinculados estrechamente a sectores fascistas del Estado.El enemigo es débil en lo estratégico y fuerte en lo táctico, es débil en lo estratégico por su carácter de clase y es fuerte en lo táctico porque es un ejercito con una historia de más de 100 años, con armas modernas, numéricamente superior a las guerrillas revolucionarias y entrenado, apoyado y supervisado por el gendarme de la contrarrevolución mundial, el imperialismo norteamericano.

Tercera Característica. En Colombia han surgido varias guerrillas revolucionarias en el campo y en la ciudad con un desarrollo desigual. En la historia militar de Colombia contemporánea se han presentado dos formas de lucha armada revolucionaria: Guerra de guerrillas, en donde se logro el establecimiento de órganos de poder como en Cundinamarca y Santander durante la Guerra de los Mil Días (1899-1902), en el periodo comprendido entre 1948 a 1953 con las guerrillas del Llano y el Davis (Tolima 1952); y en el periodo desde mediados del 60 hasta hoy, Marquetalia (1.964), en los llanos del Tigre (1965), y en la actualidad en las zonas donde las organizaciones guerrilleras ejercen el poder. Insurrecciones en el Líbano Tolima (1928), Bogotá (1948), Barrancabermeja (1948) e Ibagué (1948), que implantaron gobiernos o juntas provisionales que duraron corto tiempo (de 3 a 8 días), estas dos formas de lucha deben ser tenidas en cuenta por el movimiento revolucionario y el Partido Comunista. Solo tomando la actual guerra civil revolucionaria, han surgido varias guerrillas revolucionarias en el campo y en la ciudad especialmente en su inicio (1964-1970) como respuesta a la represión y a la imposibilidad de desarrollar las luchas democráticas durante el Frente Nacional como en los gobiernos de Guillermo León Valencia (1962 a 1966) y Carlos Lleras Restrepo (1966 a 1970). En relación con la situación internacional las guerrillas revolucionarias surgieron durante el auge de las luchas de liberación nacional y la existencia de países socialistas que le dieron impulso y fortaleza. Nacieron como unidades armadas pequeñas como destacamentos para la defensa de la vida que se fueron desarrollando a guerrilla móvil. Sin embargo, son pocas las guerrillas que han llegado a nivel de ejercito regular de carácter guerrillero, muchas de ellas se quedaron en ciertos niveles de guerra de guerrilla sin una perspectiva estratégica. Las guerrillas colombianas son esencialmente campesinas, una parte de sus cuadros de dirección son de origen urbano, sus acciones la realizan principalmente en el campo y en ciudades pequeñas (con excepción de la guerrilla urbana del PLA, el M-19, ADO y las milicias urbanas). La posición de tener el campo como escenario principal ha variado pasando de las bases en zonas alejadas a estar hoy más cerca de la población urbana. El desarrollo político, militar y logístico de las guerrillas es desigual, en términos generales las FARC-EP y el ELN son ejércitos relativamente grandes (El ELN es numéricamente inferior a la FARC), están bien armados y pertrechados y tienen buen manejo de comunicaciones, pero también existen agrupaciones guerrilleras con pocos combatientes. A partir de 1986

las organizaciones guerrilleras en especial las FARC-EP y el ELN han crecido en cantidad y cualidad, subsistiendo también otras agrupaciones con menos capacidad política y militar. Las zonas controladas son extensas y desiguales en su desarrollo socioeconómico. En cuanto al nuevo poder se puede decir que lo poseen principalmente las FARC-EP y en cierto sentido el ELN, control que ejercen a través de asambleas de las organizaciones de masas, cumplen funciones legislativas y judiciales o controlan los viejos órganos de poder llenando el vacío de poder producto de la guerra. La historia de Colombia sobre todo la contemporánea muestra como los partidos, organizaciones revolucionarias y el pueblo colombiano, han participado en la lucha armada y la lucha política (desde la tribuna, la prensa y el parlamento, la lucha económica y la movilización de varias maneras). Sin embargo, la actual guerra civil revolucionaria es una guerra popular incompleta, en el sentido en que lo plantea el Presidente Mao: "Así, aunque la actual Guerra de Resistencia es revolucionaria, su carácter revolucionario es incompleto porque no es todavía una guerra de masas." (Entrevista con el periodista ingles James Bertram, O.E, Tomo II)

 

Cuarta característica. Los Partidos Comunistas y las organizaciones revolucionarias. En Colombia han surgido varios Partidos Comunistas durante los últimos 80 años, algunos de ellos como producto de la división interna del Partido Comunista Colombiano PCC y del Partido Comunista de Colombia/marxista-leninista, PC de C (ml) y otras expresiones del proletariado de carácter maoísta. La existencia de varios partidos y organizaciones comunistas no ha permitido la conducción única de la revolución democrática y la guerra civil revolucionaria. Así pues es necesaria la lucha por un Partido Comunista Unico que logre dotar a la revolución y la guerra de una dirección única. La reconstitución del PCC-M es un paso en la búsqueda del Partido Comunista Unico y su participación en la guerra civil revolucionaria aportara a imprimirle el sello del maoísmo a la revolución y a la guerra revolucionaria.Teniendo en cuenta, las características de la guerra revolucionaria en Colombia que esta pasando por la modalidad de guerra civil donde participan sectores del pueblo organizados en ejércitos revolucionarios en lucha contra el Estado y sus fuerzas armadas esta guerra es prolongada debido a la correlación de fuerzas entre el movimiento revolucionario y la reacción que lleva 36 años, encontrándose en el equilibrio estratégico debido al control ejercido en el campo por la guerrilla mientras que el Estado y las fuerzas armadas controlan las ciudades. Es una guerra revolucionaria donde aun no existe unidad entre las organizaciones guerrilleras, entre estas y los partidos comunistas y organizaciones revolucionarias, que logre dotar a la revolución y la guerra de una dirección única. Esta guerra es popular por que participan diferentes sectores del pueblo pero es incompleta debido a la insuficiente coordinación de las diferentes formas de organización y lucha de las masas con la guerra.

El PCC-M debe estudiar la historia militar de Colombia tanto del camino del pueblo como del camino burocrático y entender que la guerrilla revolucionaria es una realidad nacional e histórica. Nacional pues acción y posición influye en las decisiones de la política nacional; es histórica porque se ha mantenido desde mediados del 60 hasta hoy, con periodos de desarrollo y estancamiento.

 

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